miércoles, 19 de septiembre de 2012

Por qué los mercados no confían en este caótico país?

Todo egolatra tiene su rinconcito de pensar y el mio esta muy vació ultimamente. Y no porque no tenga nada que decir o reflexionar, sino todo lo contrario. Son demasiados los pensamientos que asaltan mi cabeza, pegandose unos con otros, por ocupar un puesto, en la misma, en el transcurso de los días.
Pero hay un pensamiento, que con diferencia es el que mas se repite...un pensamiento que me tiene marchita, hastiada, mustia...os hablo de la situación por la que atraviesa España, esa treinteañera que nos a costado criar y trabajar, para ahora tirarla a los leones...
Por qué los mercados no confían en esta treinteañera, que ha vivido años locos y fiestas por todo lo alto..no confían en ella y por ende en nosotros, porque esta jovencita a visto como todo tipo de maleantes y malechores, bajo el disfraz de gestores, bien económicos, bien políticos, han hecho con ella lo que han querido, ante nuestros ojos, con nuestra aprobación  y consentimiento..porque formamos parte del problema y tenemos parte de responsabilidad.
Los mercados no confían en este país, por un hecho muy simple, llamado "impunidad". Puesto que en este país  la corrupción es perdonada, aceptada y a veces hasta aplaudida...
Que más le da a los mercados si vamos o no a ser rescatados, si la imagen que vendemos, es que por mucho dinero que entre, la gestión del mismo será deficitaria e ineficaz y a nuestra reciente historia económica me remito.
Cómo van los mercados a tomar en serio a un país, que ha despilfarrado sus arcas publicas, que las a malgestionado, que las ha malversado y en dicho país no pasa nada...pues queridos de ahí que los mercados, hagan lo que hagan con nosotros desconfíen.
Y la culpa no es solo de políticos gestores, sino también de la población, no queramos escurrir el bulto.
Culpa nuestra es desde el momento que no exigimos responsabilidades, culpa nuestra es, desde el momento que no exigimos explicaciones, culpa nuestra es, desde el momento que clamábamos por aeropuertos, hospitales y colegios a discreción, sin mira alguna. Culpa nuestra es, desde el momento que si no dotaban a nuestra comunidad de las infraestructuras, que nosotros, populo no instruido en materia, considerábamos debíamos tener, lo castigábamos en las urnas. Culpa nuestra es, desde el momento en que nos hemos comportado de modo irresponsable, permitiendo una política y gestión igualmente irresponsable, pero voy mas allá, no es que la hayamos permitido, es que la hemos exigido.
Por lo tanto ahora no nos llevemos las manos a la cabeza y queramos cargar toda la culpa a la clase política, que es lo fácil.
Hagamos  un poquito de "mea culpa" reflexionemos y tomemos la acción, pero tomemos la acción desde un punto critico con capacidad de critica, no permitamos mas abusos y exijamos responsabilidades, desde nuestra propia responsabilidad.

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